Paso 1: Comprobar si las pechugas de pollo tienen algún resto de grasa, si es así, retirar. Disponer las pechugas en una tabla, cortarlas en forma de dados, medianos, con la ayuda de un cuchillo para carnes.
Paso 2: Poner los trozos de pollo en un bowl, añadirle sal y pimienta negra. Vertir un chorro de aceite de oliva sobre la carne para que tome gusto.
Paso 3: Añadir orégano y revolver todo el marinado muy bien. Cuando los ingredientes hayan impregnado en el pollo, proceda a tapar el bowl con papel film, llevarlo a la nevera por 30 minutos para que marine.
Paso 4: Mientras tanto, picar en trozos de piña, eliminando el centro corazón de la misma, cortarla en trozos medianos. De la misma manera con el pimentón rojo.
Paso 5: Una vez transcurrido el tiempo del amaserado del pollo y se tenga en trozos la piña y el pimentón, retirar el bowl del refrigerador y armar las brochetas con palillos de cocina o pinchos. Alternar un trozo de carne, piña y pimentón. Así sucesivamente con las demás brochetas.
Paso 6: Vertir un chorro de aceite de oliva en una sartén o plancha, cuando haya alcanzado la temperatura deseada, introduzca las brochetas sobre la misma, dejar cocinar hasta que estén doradas por todos los lados. Es necesario que el fuego este medio bajo para que cocine bien por dentro, aprovechando los jugos.
Paso 7: ¡Es todo! Así de sencillo es preparar unas riquísimas brochetas de pollo al estilo hondureño. Una vez que la pruebes, no vas a querer parar de hacerlas en tus reuniones.